SI HABLO DE TRIAS ES PORQUE HABLO DE CLOS

SI HABLO DE TRIAS ES PORQUE HABLO DE CLOS

Hola queridos amigos, ¿os extrañará que para recordar al alcalde Clos, recuerde unas palabras del alcalde Trías en el año 2013?
Ya veréis como no os extraña. 

Tomando una cerveza en los jardines del Palauet Albéniz, con motivo de la celebración de los Campeonatos del Mundo de Natación, mi último año en activo, coincidimos, en un aparte, mi amiga Teresa Samaranch y Xavier Trías, alcalde. La conversación, tranquila y muy interesante, se produjo en torno a mi decisión de jubilarme una vez finalizado el Campeonato. 

Trías exclamó: “no me digas, si eres más joven que yo!” 
– “Alcalde, sueño con disponer de mi propia agenda y disfrutar de mi libre albedrio. Solo de pensar que me jubilo, me siento feliz”  
– “No me digas. Yo no puedo. Con la pensión no me llega.” 
Supongo, seguro,  que eso nos lo dijo en broma, sarcásticamente.  

La conversación, entonces, giró hacia el tema, aún incipiente, de las reivindicaciones de Catalunya y el clima de confrontación permanente con el Estado. Le dijimos que era un horror estar discutiendo, todos los días, los agravios con Madrid. Que esa confrontación era muy pesada y que cada vez íbamos a peor. Que en la organización del mundial ese tema nos hacía perder mucho tiempo en discusiones estériles. 

Trías nos confesó que Madrid le encantaba. Que con Esperanza Aguirre la cordialidad en el trato era muy superior a la confrontación. Y que tenía confianza en que se encontraría una solución. Poco más pudimos decirle. Era el alcalde el que nos estaba haciendo confesiones personales de hombre dialogante, abierto y cosmopolita y, nosotros, encantados de escucharle. 

Después, sus posiciones políticas han sido las que ya conocéis y no son objeto de mis comentarios. 

Si hablo de Trías es porque hablo de Clos. Una paradoja como vereís. Los dos médicos. Los dos con buena sintonía, o al menos eso se comentaba. Ya se dice en el argot profesional que entre bomberos no se pisan la manguera.  El caso es que, no recuerdo porqué, le preguntamos a Trías sobre Clos y nos dijo “Éste es el más listo de todos. Se fue en el momento oportuno, bien lejos, y ahora, ya está hablando con todo el mundo para prepararse el regreso, y eso que aún le faltan 5 años para su cese como director ejecutivo en la ONU HABITAT” 

Y vaya regreso. Joan Clos, después de su vuelta a Barcelona, no ha parado de buscarse la vida. Vida diversa y poco ligada a su pasado ideológico. 

Dos ejemplos; En julio de 2019, el presidente de la Generalidad Quim Torra, lo ficha como experto en el Consejo Asesor para el Desarrollo Sostenible de Catalunya (CADS), un organismo de participación y consulta en relación con las políticas que tienen incidencia sobre el medio ambiente. 

Y más recientemente, en abril de 2020, Clos asume la presidencia de la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (Asval), una organización impulsada por las grandes inmobiliarias españolas. 

Que nadie piense que estas notas tienen como base la crítica hacia el alcalde Clos. Fue mi alcalde durante una parte importante de mi responsabilidad en Fira de Barcelona y, especialmente, durante el Mundial de Natación BCN2003. Y estoy agradecido a su confianza en mi persona. 

Son simplemente, como hago en cada escrito, un estruje en mi memoria para recordar anécdotas desconocidas que os generen, queridos amigos, una sonrisa cómplice. Y pensareis, ¿pero de Joan Clos qué? 

Que nadie lo dude. En la próxima, sin preámbulos, recordaré como lo conocí y como lo traté. Y, posteriormente , volveré con Trías. 

Ahora toca despedirme.

Gracias amigos por leerme.